¿Es mi hijo un ‘crack’ del running?

Pedro Ruíz, coordinador de la Escoleta de Corredors que impulsa la tienda Base Esports Parra de Girona, la intención de dicha escuela es “ayudar a los niños a entender que el deporte es una parte más de su día a día”.

Pedro Ruíz Sánchez (1971) es el entrenador y director técnico de la ‘Escoleta’ de Corredors que impulsa la tienda Base Esports Parra de Girona. Monitor de atletismo por la Federación Catalana y profesor de Educación Física por Intesa, este atleta de 45 años fue, en su juventud, subcampeón de España junior de 20 km y subcampeón de España de media maratón de la categoría Promesa.

Más recientemente, ha sido tres veces campeón de Catalunya de 3.000 metros lisos en pista cubierta de la categoría Veteranos.

Ruíz es un apasionado del atletismo però, sobre todo, un deportista que disfruta transmitiendo sus conocimientos y fomentando la afición hacia el atletismo entre los corredores que entrena en dicha Escoleta (pequeña escuela, en catalán), así como entre los integrantes del club de corredores adultos que también impulsa la citada tienda Base Esports Parra de Girona.

Preguntado sobre la edad minima de los niños que entrena en la Escoleta, el deportista dice que “los más pequeños tienen cinco años que es cuando pueden empezar a hacer, generalmente, actividades extraescolares”. Durante este curso 2015-2016 ha entrenado a 24 niños de edades comprendidas entre los 5 y los 14 años.

INTEGRIDAD PERSONAL Y DEPORTIVA

La intención de esta pequeña escuela de corredores es “ayudar a los niños a entender que el deportes es una parte más de su día a día. Pretendemos generarles la idea de que, mediante una serie de actividades físicas, obtendrán una serie de experiencias que les hará más completos como personas y como deportistas”.

El atletismo es un deporte ‘peligroso’ si abusas de él antes de hora

Ruíz destaca que “a esa edad, es mejor promocionar el deporte mediante juegos adaptados al atletismo que les hagan disfrutar. No se trata de generar una competitividad desmedida . En resumen, nos proponemos introducirlos en el running como una faceta más de su desarrollo personal”.

Este curtido atleta reconoce que “el atletismo es un deporte ‘peligroso’ si abusas de él antes de hora”. Lo dice al preguntársele sobre la edad que él considera como la mejor para que un niño empiece a correr ‘en serio’.

DEPORTE MUY SACRIFICADO

Ruíz argumenta su adjetivo de ‘peligroso’ añadiendo que “si el niño o niña llega a la adolescencia ‘quemado’ de tanto entreno, la ‘meta’ que más probablemente alcanzará sera el abandono”.

Para el director de la Escoleta de Corredors, “el atletismo es un deporte muy sacrificado y no conviene saltarse etapas de la madurez del niño, ni que éste se deje en esa ‘carrera por el pretendido éxito’ una serie de importantes momentos de su crecimiento. Todo llega cuando debe llegar. Las federaciones ya crean campeonatos con unas mínimas para poder acceder y participar y, como dice el dicho, “no por mucho madrugar, amanece más temprano”.

Se plantea a Ruíz la sorpresa que causan sus palabras, en estos tiempos en los que parece exigirse al reloj y al calendario que corran más. Tras sonreir reconoce que su opinión, “ciertamente, difiere mucho de la mayoría de entidades y clubes”. Tras ello propugna que “sería interesantísimo que las ‘escoletas’ fueran multideportivas, que tocaran diversas disciplinas cuando los pupilos son de edades tempranas, que ello propiciaría una formación motriz de aquellos más completa, que evitaría precipitaciones y favorecería decisiones más acertadas ante cada caso y situación”. Tras lo dicho, Ruíz continua defendiendo que “sería a partir de los diez años cuando debería plantearse al niño la posibilidad de encaminarse hacia un deporte más concreto en virtud de sus deseos y capacidades”. Sin embargo, el atleta reconoce las dificultades que este planteamiento entraña, “porque muchas entidades necesitan captar a público infantil y juvenil para obtener ingresos, así como para asegurarse integrantes en sus equipos”.

EL ‘CRACK’ ¿NACE O SE HACE?

El director de la Escoleta de Corredors de Base Esports Parra de Girona titubea al ser preguntado sobre si un ‘crack’ del running nace o se hace. Para empezar, afirma que “se nace con unas cualidades que se deben trabajar y explotar, porque está claro que se necesita de una calidad”.

Unas buenas piernas y un buen ritmo cardiovascular pueden ser importantes pero la falta de mentalidad puede llegar a inutilizar esas virtudes

De todos modos, progresivamente va precisando: “pero hay que trabajar a tope. Y la mentalidad y la autoconfianza también son muy importantes. Porque saber dar el 100% es difícil. Hay gente que cree que solo se necesita nacer con unas buenas piernas o con una gran capacidad cardiovascular. Esos rasgos pueden ser muy importantes, pero la falta de mentalidad nos puede llegar a inutilizar todas esas cualidades si no se saben gestionar”.

Por el semblante de Pedro Ruíz se aprecia que no está muy de acuerdo con la definición habitual que impera actualmente del ‘crack’ y, menos aún, si el entorno es el infantil. Por ello se apresta a sentenciar que “para mi un ‘crack es el que consigue resultados y objetivos en función de sus condiciones, tiempo para entrenar, descansar… Por eso, un ‘crack’ también puede ser ese amigo que pesaba 140 kilos y ahora está en 83, después de haber salido a rodar cinco días a la semana, y de haber mejorado su estilo y calidad de vida”.

¿HAY INDICIOS PARA DETECTAR A UN CRACK?

¿Qué aspectos físicos pueden constituir indicios de que un niño o una niña puede ser un o una ‘crack’ del running? Pedro Ruíz sostiene que “hay más que indicios físicos”. A continuación sostiene que “cuando realmente se ve si alguien tiene cualidades es cuando las pone en práctica. Y cuando las plasma se detecta relativamente rápido. Cuando un grupo de niños se ponen a correr, enseguida se ve quién destaca y quién no; también se aprecia quien destaca mucho sin hacer apenas esfuerzo. Y luego, al comparar los tiempos de ese o esos niños que destacan con los de las tablas históricas que uno tiene te permite tener rápido la respuesta”.

Cuando el ‘avalador’ del ‘crack’ es el padre, ¡mucho ojo!

Sobre los indicios psíquicos del niño que puede llegar a ser un ‘crack’, Ruíz subraya un concepto: “la mentalidad ganadora”. Según añade, “el espíritu competitivo se palpa en el día a día del niño, le ‘supura’ en todo lo que hace. Se le ve que quiere estar por delante de los demás en todo. Ese niño presenta el perfil de lo que popularmente se conoce como un ‘picado’. Y ser un ‘picado ‘ para correr es clave porque propicia que des lo mejor que llevas dentro. Pero eso, claro, hay que aprender a gestionarlo y en ello jugarán un papel decisivo la familia, el entrenador, los compañeros, los amigos, el entorno. Todas esas personas y el escenario tienen que favorecer que ese niño o niña ‘promesa’ vea que hay más vida fuera del deporte y que por mucho éxito que pueda llegar a alcanzar en él, debe ser agradecido y, sobre todo seguir siendo humilde por más triunfos que coseche”.

EL ‘OLFATO’ PATERNO

¿Quién conviene que avale el talento en ciernes del niño o niña ‘crack’ del running?. Pedro Ruiz, parte de una premisa clara y rotunda: “aquí ya le digo que no ese el objetivo que tenemos en nuestra escoleta. Es más, cuando el ‘avalador’ es el padre, ¡mucho ojo! No tiene porque ser siempre así, pero sucede a veces que ese padre (o madre) lleva cierta frustración atlética infantil, o se siente más ilusionado/a por ese reto deportivo que su propio hijo”.

Se nota que Ruíz prefiere no ‘mojarse’ demasiado en esta cuestión pues añade enseguida que “creo que es peligroso tener un comportamiento ‘profesional’ cuando se está tratando con niños”.

Como conclusión, de todos modos, el director de la Escoleta de Corredors de Base Esports Parra, afirma: “tal vez, buscar un entrenador sea lo más adecuado”.

CÓMO COMUNICAR LA NOTICIA

¿Cómo hay que explicarle a los padres que su hijo o hija puede ser un ‘crack’ del running? El instructor carraspea y lanza: “le diré lo que yo hago, no lo que se debería hacer”. Tras un brevísimo silencio que causa expectación sentencia: “por muy ‘crack’ que sea el niño o la niña, mi opinión es que se recomiende a los padres que no vuelquen las primeras etapas de la vida del niño al 100% en algo tan delicado como esto, que le animen a estudiar, que tenga vida social; que le ayuden a combinar ese talento por el atletismo o el running con el resto de facetas, que si el niño o la niña es capaz de combinar todo eso estén tranquilos y que todo lo que les pueda dar el atletismo lo disfruten como algo regalado. En conclusión, que todos, padres y niño puedan decir ‘También fui un crack en el atletismo’… Sí, creo que este es el mejor consejo que puedo dar en este sentido”.

Hay que evitar que el niño lo deje todo por el atletismo

Tras lo expuesto parece obvia la respuesta de Pedro Ruíz sobre lo que los padres deben o deberían evitar en el caso de tener un hijo o hija que apunte maneras de ‘crack’ del running: “lo que hay que evitar es, básicamente, el dejarlo todo por el atletismo, así como el propiciar que el niño pueda llegar a creerse un auténtico privilegiado porque, aunque lo sea, debe fomentarse en su personalidad que lleve esas cualidades como algo normal y sin falsas pretensiones e ilusiones”.

SOLO DOS O TRES NIÑOS ‘CRACKS’ LLEGARON A SER FIGURAS DEL RUNNING

El índice de ‘promesas’ infantiles del running que, al llegar a la edad adulta consumaron su rol de ‘crack’ no es, precisamente, estimulante. El índice “es muy bajo”, asegura Ruíz. “Lo es tanto, tanto”, añade, “que yo, en cerca de 35 años corriendo, podría decir que sólo lo he visto en uno, dos o, a lo sumo, tres casos. Son muy pocos, poquísimos los que llegan a la élite, es decir, a vivir de esto. Y, además, algunos tampoco es que hayan acabado, después, demasiado bien”.

El director de la Escoleta de Corredors de Base Esports Parra explica que “nosotros difundimos una cosa diferente. Queremos que los niños sean deportistas por todo lo bueno que ello conlleva: salir, relacionarse, esforzarse, tener mentalidad positiva…todas esas lecciones de vida que el deporte nos brinda. Pero, no por el dinero. Y lo digo porque, lamentablemente, hoy al deporte demasiado a menudo, se le relaciona de forma excesiva con el dinero. Pienso que existen otras vías más seguras para vivir que el atletismo. Este deporte es una apuesta muy, muy arriesgada”.

EL ENTRENADOR

Para Pedro Ruíz quien debe ocuparse del talento atlético del niño que apunta maneras de ‘crack’ del running es un entrenador. “Un buen entrenador dosifica bien las puntas de estado de forma. Y es que es relativamente fácil hacer que alguien corra mucho. Pero hay que hacerlo bien. Hay que saber cuándo hay que correr, cómo hay que entrenar y cómo hay que descansar para poder volver a correr bien”.

Al ‘crack’ precoz del running deben ayudarle sus padres… pero no solo para que sea un buen corredor

El director de la Escoleta de Corredors de Base Esports Parra de Girona recuerda que “hay gente que no acaba de cuajar; tal vez porque no entendieron cuando debían entenderlo que el atletismo es un deporte muy exigente, que hay que saber llevarlo, que hay que saber alargar los mejores momentos y saber cuando hay que dar una tregua al cuerpo”.

Pedro Ruíz concluye como consejo colofón a los padres de futuros cracks del atletismo subrayando que lo mejor que pueden hacer por sus hijos es “darles cariño y apoyarles. Pero no sólo para que sean unos buenos corredores, sino para que lo sean en todo”.

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