Trailxtrem reconoce vivir el peor inicio de año de su historia

El detallista no acaba de encontrar justificación al descenso de ventas que viene experimentando en los útimos meses. El propietario de Trailxtrem, Jorge Gil,  sostiene que los aficionados siguen corriendo por la montaña y que, en general, no hay problemas económicos agudos que afecten al consumo, como demuestra el importante gasto que viene registrándose en restauración, turismo y ocio en los últimos meses.

No obstante, el minorista observa que el gasto realizado en ocio repercute en una menor compra de material deportivo, afectando especialmente durante los períodos de vacaciones como los de Semana Santa y los puentes. Después de esas festividades, “la venta flojea mucho; se nota que la gente ya ha gastado su presupuesto”, apunta Gil.

Competencia de las marcas

La caída de ventas en Trailxtrem podría ser atribuible a diversas causas, según plantea el comerciante. Por una parte, expone que “hay marcas que han tomado las riendas de su producto, están vendiendo directamente y haciendo la competencia a las tiendas comercializando su producto a un precio más barato”.

Jorge Gil señala que “determinadas marcas han reducido su red de distribución de tiendas físicas, desprendiéndose por diferentes vías de aquellos establecimientos que no les interesan, como si sobraran”.

El detallista indica, no obstante, que “hay marcas que sí apuestan por las tiendas especializadas que cuidan su producto, pero otras marcas ponen condiciones inasumibles para que los dejes, mientras que otras que siguen ofreciendo su producto, al mismo tiempo se dedican a liquidarlo a través de su propia web”.

Ante esas crecientes complicaciones, el minorista advierte que “la tendencia es que los más pequeños van tirando la toalla”.

Popularización del trail y competencia online

Gil sostiene que el despegue de la práctica del trail runnning, hace unos cinco años, conllevó la entrada de la categoría en los grandes operadores online, convirtiéndose en competencia de las tiendas especializadas. El detallista añade que esa competencia se ha agudizado tras el auge del comercio online experimentado en la pandemia.

El detallista manifiesta que “sigue habiendo clientes que prefieren comprar en la tienda física, pero cada vez nos encontramos más con aficionados que buscan nuestro asesoramiento para después comprar vía online en otras tiendas”.

CONSUMIDORES ‘FILÓSOFO’

El detallista ironiza que es habitual el caso de “los filósofos”; se trata de clientes que van a la tienda física, preguntan y se prueban las zapatillas, dicen “me lo voy a pensar” y ya no vuelven, pues seguramente acaban comprando online.

Ese comportamiento se está acentuando hasta tal punto que hay quien ya ni siquiera se desplaza a la tienda, sino que pide asesoramiento por email, teléfono o Whatsapp, sin aparente intención de compra.

Cambiar el chip

Gil afirma que “hay que ser realista y cambiar el chip”. Su apuesta actual pasa por potenciar grupos de entrenamiento y actividades con los clientes y aficionados, explotando todos los servicios que no se pueden ofrecer desde los canales online para atraer y fidelizar clientela.

Pese a todo, el minorista confía en un repunte de ventas con el inicio de la temporada alta y se manifiesta expectante ante la evolución de las ventas en los próximos meses.

Como punto positivo, destaca que, a diario, se acerca hasta la tienda gente nueva, aficionados que están empezando en el trail o quieren dar el salto desde el asfalto.