Bike CRM impulsa la digitalización de los talleres de bicicletas

El CEO de Bike CRM, Oriol Jiménez, explica que su software está siendo utilizado actualmente por 30 talleres de bicicletas, principalmente en España, , pero también en otros países como Francia, Portugal, Bélgica, Chile o Uruguay.

“He llevado mis bicis a muchos talleres que todavía apuntan lo que hay que hacer en una libreta… eso genera numerosos problemas”, manifiesta el directivo. Jiménez resume de esta manera las ventajas de la digitalización: “llevas la bici; te la ponen en el sistema; el mecánico va marcando las tareas, apuntando notas que puede querer comentar al cliente; el sistema puede en enviar notificaciones al cliente según sea necesario o cuando esté lista la bici…”.

Jiménez señala que “ese es el proceso básico” para añadir que “la digitalización aporta más beneficios como disponer de un historial que permite recordar al cliente cuando es el momento de hacer un nuevo mantenimiento o cambiar determinado componente”. Asimismo, el directivo apunta que ese historial es también de utilidad para comprobar, ante posibles reclamaciones, los períodos de garantía.

Clientes en Europa y Sudamérica

Bike CRM dedicó su primer año de existencia al desarrollo del software, trabajando en colaboración con media docena de talleres. Tras iniciar el pasado año su comercialización, en la actualidad el producto está siendo utilizado en 30 talleres, principalmente en España, pero también en otros países como Francia, Portugal, Bélgica, Chile o Uruguay. El CEO prevé cerrar este año 2023 con 50 clientes y espera llegar a las 200 tiendas en 2024.

Más allá de ello, se declara “muy centrado aún en el desarrollo del producto”, siendo su principal objetivo “convertirse en el estándar de la industria” a nivel mundial. Bike CRM, además de su módulo para taller, dispone de un módulo para la gestión de la tienda y está preparando un nuevo módulo para alquiler de bicicletas, todos ellos integrados, según destaca Jiménez.

Sector bici analógico

El informático reconoce que su programa “no es ninguna revolución”, indiciando que “no estamos inventando nada, son sistemas que, por ejemplo, están en todos los talleres de coches”. En cambio, según explica, el sector ciclista sigue siendo mayoritariamente analógico, especialmente en lo que respecta a los talleres. La cuestión que plantea es “por qué no se ha digitalizado el sector de las bicis, si llevamos décadas ya de digitalización.”

Jiménez expone que, por una parte, hay talleres menos profesionalizados que no ven la importancia de la digitalización. “Hay que hacer una labor didáctica con ellos”.

Por otra parte, según indica, otros talleres sí quieren dar el paso, pero no han encontrado el software adecuado. El CEO reconoce que existen otros programas de gestión de talleres en el mercado, pero asegura que “han quedado anticuados”.

Problemas de estándares

El informático manifiesta que toda la industria ciclista se ve afectada de un retraso en la digitalización.  Por ejemplo, explica que se da un problema con los estándares en los protocolos informáticos de los proveedores para la gestión de pedidos, lo que hace que los talleres de bicicletas “pierdan mucho tiempo” para encargar el producto que precisen.

Jiménez explica que en industrias como la del motor es posible realizar de manera unificada los encargos a los proveedores, en cambio en la industria ciclista todavía falta entendimiento informático. El directivo aboga porque todos los actores del sector ciclista remen juntos para conseguir establecer esos protocolos estándar.

 

TONI CARPIO: