FitConcept Pro apuesta por la personalización en busca de los 1.000 suscriptores

La personalización de los servicios deportivos es una de las tendencias que han cobrado mayor importancia durante la pandemia. Son muchos los clientes de grandes centros que huyen de la masificación de las salas y apuestan por conceptos en los que se apuesta por una mayor atención y un trato más personificado.

Es por ello que, un año después de su lanzamiento, FitConcept Pro ha querido acercarse a los gimnasios y a los instructores individuales con una propuesta más personalizada. La marca ha decidido impulsar una nueva línea de negocio orientada a los centros deportivos y gimnasios a partir de la creación y el desarrollo de clases colectivas propias y específicas de cada centro.

COREOGRAFÍAS ADAPTADAS

Los instructores de FitConcept Pro diseñarán coreografías adaptadas a las necesidades específicas de cada centro. Una propuesta con la que buscan que cada centro disponga de un programa propio de clases dirigidas acorde con su identidad corporativa que le permita generar un mayor sentimiento de pertenencia entre sus usuarios.

“Nos dimos cuenta que los centros querían huir de los estándares impuestos por programas importados del extranjero, y que buscaban dar algo completamente diferente a sus socios, pero no podían invertir tiempo, esfuerzo ni dinero, porque sus profesores no podían asumir esa carga de trabajo o mantenerla en el tiempo de manera profesional”, explica el fundador y CEO de la marca, Ernesto Acosta.

FitConcept Pro tiene como objetivo distribuir a gimnasios e instructores programas propios de entrenamiento y formación para que los trabajadores de cada centro puedan enseñar cada modalidad a los usuarios finales.

200 CENTROS Y 500 INSTRUCTORES

En la actualidad, FitConcept Pro da servicio a alrededor de 500 instructores individuales que están suscritos a sus programas, y que están repartidos por varios países como España, Portugal o Latinoamérica (principalmente Argentina, México y Chile).

A nivel de gimnasios, la marca también forma a los profesionales de unos 200 centros, entre los cuales figuran operadores como Okeymas, algunos franquiciados de Anytime Fitness, o Activa Club. Con esta última cadena han cerrado acuerdos con tres de sus centros (Almería, Puerto de Santa María y Jerez) para la adquisición del programa Gluteboom®.

Los gimnasios pagan 100 euros por instructor y programa por el que se quieran formar, además de una cuota trimestral de 50 euros.

La marca espera estabilizar estas cifras mientras dure la primera fase postpandemia y alcanzar la cifra objetivo de 1.000 suscriptores en 2023.

FitConcept Pro da empleo a seis trabajadores, además de a sus colaboradores e invitados puntuales.