Diario de confinamiento (VIII): La peor amenaza de los dos últimos siglos

También la organización de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 se ha sumado a la larga relación de organizaciones deportivas que se han visto obligadas a cancelar sus convocatorias. Es una muestra más del efecto dominó que la pandemia del coronavirus está propiciando en la globalidad de los ámbitos del mundo. Sin lugar a dudas, esta es la guerra más mundial de todas las guerras mundiales que ha habido en la historia de la humanidad, pese a no mediar tiros, ni cañones, ni misiles, pues todos los lugares del planeta se sienten amenazados por el contagio de este virus y la gran mayoría de ciudadanos del mundo nos hemos atrincherado en nuestras casas para evitar ser alcanzados.

La actividad concentrada prácticamente sólo en aquellos sectores vinculados con los productos de primera necesidad, así como en aquellos de uso doméstico, propician que los expertos ya presagien que la crisis del coronavirus va a ser la más demoledora y del modo más fulminante pese a que desde las esferas gubernamentales se insista en la transitoriedad de la situación. Lo decía en la primera entrega de este diario de confinamiento. Sabemos cuando estalló la guerra pero desconocemos la fecha en la que la misma terminará.

Según el profesor del IESE, Nuno Fernandes, esta crisis del coronavirus podría costarle a España entre el 3,9 y el 10% del producto interior bruto (PIB), según cual sea el tiempo de afectación de las medidas de confinamiento.

En el mejor de los casos, partiendo de un confinamiento de un mes y medio, la parálisis de la actividad tendría en el país un impacto económico del 3,9% del PIB. Esa afectación sería de las más elevadas sufridas por la mayoría de países. No en vano, la afectación sobre el PIB de esta crisis en China se ha situado en el 3,2%, mientras que las previsiones para Alemania son de 3,6; e Francia del 3,2%; o Reino Unido, del 3,4%.

ESPAÑA ENTRE LOS PAÍSES MÁS AFECTADOS

El informe de Nuno Fernandes señala que países como España, Grecia o Portugal, en los que la dependencia del turismo es más acusada (más del 15% del PIB), serán de los más afectados por esta crisis. En este escenario, se prevé que España entre en recesión con una disminución del PIB del 2,1% este 2020.

Si las medidas de confinamiento y crisis se extienden durante tres meses (hasta mediados de junio), el PIB español podría caer hasta un 5,8%, mientras que si la situación se alargara hasta el próximo verano, la afectación alcanzaría un índice cercano al 10%.

A nivel mundial, si las medidas se prolongan hasta finales de julio de 2020, la disminución promedio del PIB sería cercana al 8%, si bien en algunos países, entre los que se encuentra España, el descenso podría ser superior al 10%.

RECESION INEVITABLE

Nuno Fernandes no duda en afirmar que “si la crisis en curso dura hasta el final del verano, la economía mundial se enfrentará a la amenaza más grave que se haya visto en los dos últimos siglos”.

Y es que, según sostiene este profesor del IESE, en esta ocasión, a diferencia de la crisis financiera de 2008-2009 y de otras comparaciones históricas, la recesión global “es inevitable”, pues “nos estamos enfrentando a una caída combinada de oferta y demanda” agravada por una variedad de factores, como la naturaleza global de la economía mundial y el papel clave que juega China, donde se inició el brote.