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CICLISMO

En 2023 repartió al 50% sus ingresos totales entre la tienda y el taller

Ciclo-Manía reivindica el valor de la pequeña tienda ciclista

“Las pequeñas tiendas de pueblo seguimos siendo necesarias”

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FACTURACIÓN ESTABLE. El propietario de Ciclo-Manía, Juan Ramón Doménech, se declara satisfecho con las ventas alcanzadas el pasado año, que se mantuvieron al mismo nivel del año 2022, teniendo en cuenta la situación global del mercado.

(8-2-2024). Ciclo-Manía cuenta con más de 30 años de historia en el sector ciclista. El propietario del establecimiento, Juan Ramón Doménech, reivindica el valor de las pequeñas tiendas-taller que dan servicio a numerosos aficionados a nivel local. Esas tiendas, además, cumplen una función de promoción no solo del ciclismo actual sino también del futuro.

Ciclo-Manía es una pequeña tienda ciclista de 140 metros cuadrados, 20 de ellos dedicados a taller, ubicada en Novelda (Alicante). Sus orígenes se remontan al año 1993, cuando se iniciaba el boom de las bicicletas de montaña, según rememora el propietario del negocio, Juan Ramón Doménech.

Tras multitud de experiencias y cambios en el sector, Domènech se mantiene hoy en día al pie del cañón. Él asume íntegramente las tareas de taller y venta en el negocio, con la colaboración de una empleada en la oficina.

Los pequeños son necesarios

“Está claro que el sector tiende a la concentración e incluso están entrando actores de sectores ajenos que ven negocio en la bicicleta y apuestan por tiendas de gran tamaño, pero también seguimos siendo necesarias las pequeñas tiendas de pueblo”, plantea el minorista.

El detallista expone que numerosos establecimientos ciclistas son negocios prácticamente de autoempleo, o con algún empleado en momentos puntuales, que cumplen una importante función dando servicio a los ciclistas locales según sus necesidades.

Doménech señala que no todos los ciclistas son “deportistas extremos, también hay numerosos aficionados de fin de semana y de tipo familiar, por ejemplo”. El detallista subraya que ese público también necesita mantener su bici. Además, conforme evolucionan, muchos de ellos deciden comprar modelos superiores, sobre todo eléctricos en los últimos tiempos. “Son servicios que hay que cubrir, no podemos perderlos de vista porque también fomentan mucho el ciclismo”, apunta Doménech.

Cuidar la cantera

El minorista manifiesta que “tampoco hay que olvidar la bici infantil, aunque no sea muy rentable”. Doménech sostiene que “tenemos la obligación de dar un servicio y cuidar a los niños que son los futuros ciclistas. Si no lo hacemos iremos perdiendo clientes por el camino”.

El detallista se declara consciente de que la venta de bicicletas infantiles aporta beneficios mucho menores que en el caso, por ejemplo, de las ebikes. También reconoce que las grandes superficies suponen una gran competencia en la venta de bicis para niños. Aun y así, Doménech reclama que “la bici infantil forma parte del sector ciclista y no se puede dejar de lado”.

2023, mercadillo de precios

Doménech se declara satisfecho con las ventas alcanzadas el pasado año, que se mantuvieron al mismo nivel del año 2022, teniendo en cuenta la situación global del mercado. Para Cicloma-Manía, la venta representó en 2023 un 50% de la facturación total, con especial demanda de las ebikes de montaña. El 50% restante fue aportado por el taller.

El detallista describe la evolución del sector durante el pasado año como un “mercadillo de precios, con tiendas desesperadas intentando sacar el stock a base de ofertas, yendo al día a día, sin un objetivo claro”. El minorista añade que “nosotros intentamos no volvernos locos con los descuentos y ofertas, hay que mantener un margen o si no los números no salen”.

2024, se mantiene el día a día

El detallista apunta que la incertidumbre aún se mantiene en este año 2024: “no se pueden hacer previsiones ni se puede estocar a largo plazo, porque los proveedores hoy tienen un precio y mañana pueden lanzar una oferta sobre la misma bici”.

Doménech indica que “no hemos hecho programaciones, hemos optado por tener las marcas representadas en la tienda”. El detallista señala que “los proveedores de bicicletas han asumido la situación, son conscientes de la situación de mercado y ya no existe la presión de hace unos meses respecto a unas cantidades de programación de bicicletas”.

El futuro: movilidad y ciclismo tranquilo

El minorista considera que el futuro de la venta en tiendas como Ciclo-Manía está en la movilidad, una categoría que “va empujando, aunque le esté costando arrancar”. Asimismo, el detallista cree que se abre un hueco de oportunidad en la venta de ebikes deportivas “no tan profesionales”.

Doménech sostiene que “hay personas que quiere hacer deporte en bicicleta, y quieren una ebike pero no están dispuestas a comprar un modelos de 10.000 euros porque no les van a sacar partido”. Según indica, se trata de aficionados que quieren rodar en caminos o pistas asfaltadas, no buscan “hacer deporte agresivo”. Ello, según Doménech, explica también el auge que experimenta el gravel. En definitiva, el minorista apunta que se trata de una potencial clientela, para modelos de gama media, a la que hay que seguir cuidando.


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