“El concepto de feria profesional está cambiando”

Las fechas de la segunda edición de Sports Unlimited no coinciden con el inicio de la campaña de sell in, lo cual fue una sugerencia de algunos de los participantes de la edición de 2009…
Hemos querido mantener la filosofía inicial del evento, que consiste en convocar al sector en un periodo alejado de las campañas de programación para que así detallistas y proveedores puedan hablar de temas que no sean estrictamente de producto, como por ejemplo estrategias comerciales, logística, temas financieros etc. A pesar que algún participante de la primera edición planteó la posibilidad de que el certamen se organizara pocas semanas antes del inicio del sell in, en las encuestas que hicimos al finalizar la primera edición la mayoría de participantes nos indicó que el formato tenía validez precisamente si manteníamos esta filosofía, ya que otras convocatorias, como por ejemplo Ispo, ya cubren la necesidad de reunir al sector para organizar las presentaciones de producto.

Detallistas y proveedores valoraron muy satisfactoriamente la primera edición de Sports Unlimited Valencia, ¿Cuál cree que fue la clave del éxito de la convocatoria?
Hay muchos factores. Uno de los principales es que es el único evento en España que reúne al sector deportivo. Otro aspecto muy valorado fue el alto nivel de los compradores asistentes, que estuvo compuesto por los directores de compra de las principales cadenas, grupos de compra y tiendas de referencia del país. Ello permitió que los expositores pudieran optimizar más sus reuniones, a lo cual también ayudó el formato de citas programadas de 45 minutos, que facilitó los contactos entre proveedores y detallistas.

Los eventos de networking parece que están de moda en el mundo empresarial…
Sí, se están confirmando como un exitoso formato para reforzar el potencial de las empresas. El motivo es sencillo: lo más valioso que tenemos es el tiempo y en este tipo de encuentros compras tiempo: los proveedores que asistan a Sports Unlimited Valencia tienen la certeza que podrán hablar con los 70 ó 80 compradores top del país, lo cual es una garantía de que podrán rentabilizar el tiempo y el dinero invertido.

¿Por qué cree que las ferias profesionales han fracasado en España?
Las ferias convencionales están perdiendo peso como punto de encuentro para presentar novedades de material porque en este tipo de certámenes no se le puede asegurar al proveedor la cantidad y la calidad de los compradores que asistirán. Lo único que pueden es confiar en la empresa organizadora. Además, debido a la anarquía que reina en este tipo de convocatorias, puede darse el caso que un proveedor no haya podido hablar con el comprador que le interesaba porque en el momento que ha venido a verle se encontraba ocupado con otro detallista. Estos dos inconvenientes no suceden con un club de negocios como Sports Unlimited, ya que los expositores saben qué detallistas asistirán y tienen la certeza que podrán reunirse con ellos debido a las citas programadas.

¿Qué cambios se plantean para la segunda edición de Sports Unlimited Valencia?
Una de las novedades de esta segunda edición es el mayor protagonismo que daremos al mercado portugués. Para ello, invitaremos a 6 ó 7 de los principales detallistas deportivos del país, entre los cuales estará lógicamente Sport Zone. Otra de las novedades tiene que ver con el tercer día del evento. A diferencia de la primera edición, los compradores no invitados que quieran asistir durante el tercer día de puertas abiertas podrán contactar con anterioridad a la celebración del certamen con los expositores para poder concertar reuniones a través de una aplicación web.

En la primera edición de Sports Unlimited se fijó en 70 el número máximo de expositores y en 140 el de detallistas invitados. ¿Por qué esta limitación?
Por el carácter exclusivo del certamen. Para garantizar la calidad de los compradores asistentes hay que limitar su número. En el sector deportivo español creemos que ese límite está alrededor de los 140. Como consecuencia, limitamos el número de expositores a la mitad para que todos los proveedores tengan tiempo, si lo desean, de reunirse con todos los detallistas asistentes.