Kilian Jornet podría probar suerte en el asfalto este 2020

Kilian Jornet ha dado a conocer su calendario para esta temporada 2020. Será un año poco cargado para el mejor corredor de trail running de todos los tiempos. En su intención de evitar al máximo los viajes en avión y pasar más tiempo con su familia, Jornet ha limitado mucho sus competiciones para esta temporada. De hecho, se puede resumir de forma sucinta: una prueba de esquí (la Pierra Menta, junto al francés Jakob Hermann), alpinismo (volver al Himalaya en primavera), volver a la Pikes Peak Maratón durante el mes de agosto para arrebatarle el récord al norteamericano Matt Carpenter (3:16:39; el año pasado Kilian ganó la prueba pero se quedó a más de 10 minutos del crono de Carpenter) y, atención, correr una competición de asfalto para cerrar su 2020.

El refranero popular es muy sabio y tiene expresiones para todo. Una de ellas, por ejemplo, “nunca digas de esta agua no beberé”. Pero, acudiendo a la jerga del pueblo, también podemos decir que “rectificar es de sabios”. Y, esto, en cierta forma, es lo que acaba de hacer el aventurero de Kilian Jornet. “En algún momento, dije que nunca correría en asfalto, pero más tarde aprendí a nunca decir nunca… así que si el entrenamiento lo permite, intentaré correr algo plano”. Con estas palabras, Jornet ha abierto un nuevo debate dentro del mundo del atletismo: ¿qué tiempo sería capaz de hacer en un maratón de asfalto el atleta catalán?

Un medio maratón como referencia, con 1.400 metros de desnivel positivo

Por ahora, sólo existe una prueba que podríamos tomar como referencia. Kilian se marcó un espectacular 1:26:48 en un medio maratón de asfalto que corrió en Noruega la primavera del año pasado. Lo que se traduce en un ritmo de 4:10 min/km. Hasta aquí, todo es más o menos normal. No obstante, dicho tiempo lo realizó sobre un trazado con 1.500 metros de desnivel positivo. Esto es, un terreno nada propicio sobre el cual el corredor demostró buena parte de su potencial. No sólo logró la victoria, sino que, además, se hizo también con el récord de esta competición, conocida con el nombre de Geiranger Fra Fjord Til Fjell.

No es la única vez en la que hemos visto las posibilidades de Jornet en una carrera sobre asfalto. Hace un par de años, Kilian hizo una incursión sencillamente espectacular, como si de un maratoniano se tratara. Completó 3 series de 5 kilómetros cada una dando vueltas a un circuito y sumando un total de 300 metros de desnivel positivo (15 kilómetros como parte de un entrenamiento total de 30 kilómetros). Los registros fueron de 14’58”, 15’20” y 15’15”, con 1 kilómetro de recuperación a 4 min/km entre serie y serie. Lo más llamativo del caso es que, antes de calzarse las zapatillas de correr, el deportista de Salomon se había calentado de lo lindo completando un entrenamiento de 4.000 metros de desnivel positivo esquiando. Y todo ello lo hizo sólo unos días después de alzarse con una nueva victoria en Zegama.

Un VO2 máximo de 90

Está claro que Kilian Jornet es un deportista con un talento natural y unas capacidades físicas fuera de lo común. Es capaz de metabolizar un máximo de 92 mililitros por minuto y kilogramo de peso. Unas cifras que le ponen a la altura de los mejores deportistas de la historia en este sentido como Miguel Indurain (con un VO2 máximo de 88), Greg Lemond (92’5) o el propio Matt Carpenter (92). Con una talla de 1.71 centímetros y 58 kilos de peso, Jornet es un corredor ligero, pero con un tren inferior muy potente (y muy distinto del que puede ofrecer un maratoniano africano como Eliud Kipchoge, más estilizado). Un dato más para exponer la excepcionalidad de la potencia física del atleta criado en la Cerdaña: Kilian es capaz de alcanzar una velocidad punta de 12 km/h en una inclinación de un 24% (en la prueba del test de Bruce).

Con todos estos argumentos, queda claro que nos encontramos ante un atleta fuera de lo común, tal y como ha demostrado con sus victorias en las carreras de trail running y en las competiciones de esquí de montaña más importantes del mundo habidas y por haber.

Pero volvemos a la cuestión, ¿qué tiempo sería capaz de lograr Kilian en un maratón de asfalto? Es una incógnita. Tal y como nos comenta Octavio Pérez, preparador físico y autor de los libros “Preparación el corredor de montaña” y “Mis primeras zancadas” (además de ser campeón del mundo máster de los 800 metros), “en las ciencias del entrenamiento, no existen las verdades absolutas ni los sistemas infalibles”. Y utiliza la jerga popular en forma de metáfora, afirmando que “todos los caminos conducen a Roma o, mejor dicho, podemos llegar a Roma por distintos caminos siempre y cuando nos guiemos por un mapa actualizado y, sobre todo, sepamos interpretarlo”.

“Kilian Jornet entrena como nadie”

Pérez destaca el rol de auto descubridor que ha caracterizado la vida deportiva de Jornet, ya que “ha explorado rutas diferentes a las que nadie se ha atrevido ni tan siquiera a asomarse”. En este sentido, destaca su potencial rendimiento y perfil fisiológico, pero también su forma de entrenar. “Nadie se prepara como él, entrenando por sensaciones, en sesiones en las que el entrenamiento es un fin en sí mismo”, afirma sin tapujos. Y destaca la dualidad del triple ganador del UTMB: “ser el mejor corredor de montaña de todos los tiempos es digno de estudio, pero es inaudito que, además, haya ganado hasta 7 campeonatos del mundo en otro deporte distinto como es el esquí de montaña”. Sus desafíos han demostrado que su potencial es prácticamente infinito (subir al Everest 2 veces en 6 días sin ayuda y sin oxígeno extra, cruzar los Pirineos en 8 días completando 830 kilómetros con 40.000 metros de desnivel positivo”.

Octavio Pérez deja claro que es difícil establecer una predicción concreta a la cuestión antes planteada. Ahora bien, “cualquier atleta que después de entrenar unas 5 horas por la mañana –salida de esquí sumando 4.000 metros de desnivel- y logre correr por la tarde 30 kilómetros, intercalando 15 kilómetros a un ritmo medio de 3’02, podría dejar con la boca abierta a más de uno, incluso a los más escépticos”. Admite que “cualquier opinión en este sentido puede parecer y ser especulación pura y dura”, pero los datos están encima de la mesa. Por este motivo, destaca el rol pionero de Kilian y aventura que “las universidades de ciencias del deporte quizás, muy pronto, se expongan a nuevos sistemas de entrenamiento gracias a todo lo que está aportando Kilian en nuestro campo de estudio”.

El récord de Julio Rey, a su alcance

En base al citado entrenamiento de series de 5 kilómetros, Octavio Pérez se moja. “Su tiempo en esos 15 kilómetros, seguramente por tierra y en terreno ondulado es una auténtica brutalidad”. Y añade que, “como entrenador, incluso me sorprende más su capacidad de recuperación entre las dos sesiones de entrenamiento, la de esquí de montaña de la mañana y la de 30 kilómetros con las zapatillas por la tarde”. Con liebres, en un recorrido llano por asfalto y sin acumular fatiga previa, y con una preparación específica, Pérez analiza los datos fisiológicos de Jornet –anteriormente citados- y vaticina que “Kilian Jornet sería capaz de realizar una marca sobre las 2:06-2:07”. Un crono que le podría situar como uno de los mejores maratonianos europeos y al alcance incluso del actual récord de España de los 42.195 metros (en posesión de Julio Rey desde 2006, en Hamburgo, con 2:06:52).

¿Qué maratón podría correr?

Más allá del qué –es decir, el tiempo-, otra cuestión es el dónde. Una de las primeras opciones que nos ofrece el calendario maratoniano de los meses de otoño en asfalto es el trazado que ostenta el actual récord del mundo de los 42.195 metros. No es otro que el maratón de Berlín, que se celebrará el próximo 27 de septiembre. No en vano, el recorrido berlinés ha visto cómo se lograban en él los últimos 7 récords del mundo de maratón en categoría masculina hasta llegar al 2:01:39 actual de Eliud Kipchoge, logrado en 2018. Un mes después tiene lugar otro major, Chicago, el 11 de octubre. Sin ir más lejos, es el circuito que ostenta el actual récord del mundo femenino. La keniana Brigid Kosgei rompió el histórico crono de Paula Radcliffe en 2019 con una marca de 2:14:04.

Otra opción, incluso con más relumbrón popular, pero con un recorrido más exigente es el maratón de Nueva York. La de este año no será una edición cualquiera. La mítica prueba estadounidense celebrará sus bodas de oro, con su edición número 50. La fecha, marcada en rojo en el calendario para muchos, será el 1 de noviembre. Sin necesidad de cruzar el charco, a Kilian aún le quedaría otra bala en la recámara si opta por correr en suelo español. Valencia celebra el mejor maratón de España. Una carrera en claro auge y que ya ha colgado el sold out con muchos meses de antelación. El trazado de la ciudad del Turia ha demostrado, sobradamente, ser rapidísimo. La edición de 2020 tendrá lugar el 6 de diciembre.

Conciencia con el medio ambiente

Más allá de dejar la puerta abierta, de par en par, a su debut en un maratón de asfalto, Kilian Jornet también ha querido dejar claro –y por eso lo reflejamos aquí- su compromiso con la protección del medioambiente a la hora de diseñar un calendario de competición tan reducido. “La montaña es mi vida y mi terreno de juego pero también quiero que pueda serlo para las generaciones que vienen. Es por ello que es imprescindible que hagamos todo lo posible por preservarlo. Entre otras cosas, este año quiero escoger y planificar mejor los viajes que realizo ya sea para competir o en expediciones. Así, intentaremos combinar el calendario con Emelie para viajar durante un periodo de tiempo largo cuando tengamos que ir lejos y evitar los trayectos cortos en avión. Cuando podamos, usaremos el coche o el tren, y viajaremos solo para carreras o proyectos que sean realmente importantes para nosotros”.

Información de contacto:

www.octavioperez.es