Bigg, a por la docena de gimnasios en su segunda fase de expansión en España

Bigg Fit avanza con paso firme en su incursión en el mercado español. La enseña de origen argentino inauguró el pasado 17 de abril en el barrio madrileño de Chueca su quinto gimnasio propio en España, el séptimo en el cómputo general, con el que da por concluida su primera fase de expansión en nuestro país.

Un avance para el que ha invertido algo más de 2 millones de euros que obtuvo de una primera ronda de financiación liderada por inversores argentinos y que le ha permitido implantarse en Madrid con cinco gimnasios propios y una franquicia, así como otra franquicia en Barcelona, en un plazo de 11 meses.

Menos de un año que ha servido a la marca boutique para “constatar que la magia que se había logrado en Argentina, donde contamos con cerca de 50 Bigg, era exportable a España”, señala el director general de la enseña en España, Gonzalo Romero.

Prioridad, armar estructura en España

Comprobado que el modelo de negocio “funciona”, con cerca de 1.400 abonados en el conjunto de sus siete clubes españoles, Bigg Fit inicia ahora su segunda fase de expansión en nuestro país, para lo que volverá a contar con el apoyo de los mismos inversores que participaron en la primera ronda de inversión, así como nuevos inversores captados desde España, que tomarán parte en una segunda ronda de financiación.

Una nueva etapa en la que, en un primer momento, la enseña se centrará en armar estructura en España. “Hasta el momento, el equipo se ha apoyado mucho de personal de Bigg Fit Argentina y ha llegado el momento de crear un equipo propiamente en España, que nos permita seguir creciendo”.

5 gimnasios propios y explotar la franquicia

De cara a los próximos meses, la intención de Bigg es ahondar en dos vías de crecimiento. Por un lado, ha previsto seguir ampliando su red de gimnasios propios, con la apertura de un mínimo de cinco clubes más en Madrid.

A ello se sumará, previsiblemente antes del verano, el lanzamiento oficial de la franquicia de la marca, con la que busca crecer especialmente fuera de la capital. Aunque ya cuenta actualmente con dos franquicias, ubicadas respectivamente en Madrid y en Barcelona, Romero explica que “están comandadas por inversores argentinos que ya conocían el potencial de la marca, siendo el objetivo ahora de iniciar oficialmente el lanzamiento de la franquicia para inversores españoles”.

Sin haberlo hecho oficial aún, la enseña asegura ya haber recibido interés por franquiciar la marca, contando con dos proyectos avanzados para implantar gimnasios en A Coruña y en Lisboa, que certificaría el desembarco de la marca en Portugal.

Asimismo, confirma que el franquiciado de Barcelona se encuentra buscando local para ampliar la presencia de la marca en la capital catalana.

“Contamos con un modelo exportable a todas las ciudades de España”, comenta Gonzalo Romero, quien sostiene que “existe espacio para Bigg en todas las grandes ciudades españolas”.

La cadena oferta instalaciones con superficies comprendidas entre los 200 y 300 m2, para lo que invierte entre 300.000 y 400.000 euros por proyecto. Su break even se sitúa en torno a los 200 clientes, si bien, su objetivo es que se superen los 300 abonados por club, encontrándose actualmente tres gimnasios por encima de esta cifra.

Tras iniciar esta segunda fase, el objetivo a medio plazo es finalizar 2024 con 20 gimnasios operativos en España, cifra que Romero se muestra confiado en que la cadena pueda cumplir. “Es totalmente realizable”, afirma.

Bigg Fit está presente actualmente en siete mercados con un total de 60 gimnasios repartidos por Argentina, Paraguay, Uruguay, Chile, Colombia y España. En junio está previsto que desembarque con un primer club en Perú, estando en conversaciones también para debutar en mercados como México y Brasil.

Sobre el resto de Europa, Romero admite “tener en mente crecer en el viejo continente una vez asentemos la marca en Iberia”, aunque asegura que “no es una prioridad actualmente”.