Calzados Bestard prevé facturar 6,5 millones de euros este 2022

El director comercial de Calzados Bestard, Mats Lindholm explica que, a parte de una caída en ventas desde el pasado otoño, el principal problema del año 2022 se ha concentrado en los retrasos en las entregas de las programaciones. La causa de ello ha sido la escasez de materias primas, con la consiguiente dificultad para proveerse de los materiales necesarios para realizar la producción.

Evidentemente, la carestía de materia prima se ha traducido en un incremento del coste, que ha afectado al precio del producto final. Lindholm señala que “por primera vez en la historia de la empresa este año hemos tenido que subir el precio dos veces”. La firma realizó en enero un ajuste de precio “más alto de lo normal pero no excesivo, confiando en que la subida de costes iba a frenar”.

Dado que las materias primas continuaron encareciéndose a lo largo del año, la empresa mallorquina tuvo que realizar, como tantos otros suministradores, una nueva subida de precios en el mes de junio. El directivo explica que se ha tratado de ajustes producto por producto y no de forma lineal, con un encarecimiento promedio del 8% sumando las dos actuaciones realizadas durante el ejercicio.

Acercándose al récord histórico de ingresos

Según avanza Lindholm, Calzados Bestard no logrará este año revalidar su récord histórico de facturación, fijado el pasado año en 7,15 millones de euros, según consta en el registro mercantil. No obstante, a falta del cierre definitivo de cuentas los ingresos del año 2022 se situarán con toda seguridad por encima de los 6 millones de euros, pudiendo llegar a estar en torno a los 6,5 millones de euros, indica el directivo.

Lindholm, que se muestra satisfecho con los resultados de 2022, expone que “el año empezó muy bien”, siguiendo la dinámica de 2021. Posteriormente, aunque se notó una desaceleración de la demanda a partir de la primavera, “aún hubo bastantes pedidos gracias a que se mantenía la inercia de interés por el outdoor”.

El directivo añade que, posteriormente, a partir del otoño, el sell out mostró mayor debilidad en España, probablemente debido a la situación macro-éconómica. A ello se unió una situación de sobrestock en las tiendas, que “se habían abastecido con previsiones de demanda de 2021”. En definitiva, Lindholm concluye que las reposiciones de la firma han caído en España desde inicios del otoño.

MAYOR ACTIVIDAD EXPORTADORA

En cambio, las exportaciones de Calzados Bestard han crecido este año respecto a 2021, situándose en torno a un 30% del volumen total de negocio frente al 25% que representaron el pasado año.

Entre los principales clientes internacionales de la compañía se hallan República Checa, Turquía, Gran Bretaña, Francia y Australia.

En definitiva, Lindholm valora que “en conjunto ha sido un buen año, estamos contentos porque a pesar de todo seguimos vendiendo bien y registrando una buena facturación mensual”.

De cara a 2023, el directivo indica que la próxima primavera la compañía trabajará con colecciones continuistas, incluyendo pocos modelos nuevos. No obstante, el ejecutivo anuncia que la firma ha trabajado intensamente en el desarrollo de nuevas colecciones para el otoño 2023 y la primavera 2024, cuando presentarán productos modernizados con innovaciones y novedades destacadas.