La empresa de turismo deportivo Roc Roi busca replicar su modelo de negocio en otros países

Carlos Rabaneda fundó Roc Roi junto a su hermano Lluís en 1996.

Hace casi 25 años que los hermanos Carlos y Lluís Rabaneda fundaron Roc Roi en el Pallars Sobirà (Lleida), una zona pionera en el desarrollo de los deportes de aventura en España. En los orígenes, el negocio se concentraba sobre todo en los meses de verano, con una oferta basada en rafting y actividades de montaña y aire libre. “Acusábamos una fuerte temporalidad y queríamos cubrir todo el año”, explica Carlos Rabaneda, quien indica que entonces decidieron apostar por el mundo de la nieve y llegaron a un acuerdo con Grandvalira para ofrecer distintas propuestas. Más adelante, con el mismo objetivo de seguir ampliando público, montaron un centro de vela en Vilanova i la Geltrú (Barcelona).

Hoy en día Roc Roi se ha convertido en una de las empresas de deportes de aventura mejor posicionadas de España. En 2018, su facturación ascendió a 5 millones de euros y la previsión es crecer un 10% y alcanzar los 5,5 millones este año. Eso sí, la empresa ha ido diversificando sus líneas de negocio y no todos sus ingresos proceden de la organización de actividades deportivas.

El kayak es un mercado muy técnico y que no despierta el interés de las grandes corporaciones deportivas

Fabricantes y distribuidores de material de rafting y piragüismo

Roc Roi tiene otra línea de negocio centrada en la fabricación y distribución de material deportivo. La compañía fabrica su propia marca de rafting, River People Staff, que cubre desde lanchas a neoprenos, cascos, etc. Además, también distribuye en el mercado español y en varios países europeos un amplio abanico de marcas de kayaks de terceros, con una cuota de mercado de más del 50% en España. Rabaneda cifra en 18.000 los kayaks comercializados al año, un 85% de los cuales son para uso en el mar frente a un 15% de aguas bravas. Sus clientes son muy variados, desde clubes a tiendas especializadas en náutica o alquileres de playa. “Es un mercado muy técnico y que no despierta el interés de las grandes corporaciones deportivas”, observa el empresario.

Organización de eventos

A todo lo anterior, se suma una tercera rama de actividad que es la organización de eventos deportivos de ámbito federativo y vinculados a su área de actividad. Así, por ejemplo, Roc Roi se encargó este año de la organización del Campeonato del Mundo Absoluto de Piragüismo de Aguas Bravas, que se celebraron en Sort (Lleida).

Internacionalización

Dentro de su vertientes como empresa de actividades de aventura, Roc Roi se está expandiendo en el exterior y forma parte del accionariado de un grupo internacional que cuenta con un centro en Calafate (Argentina), frente al célebre glaciar Perito Moreno, y ostenta dos concesiones en la zona: una actividad de kayak en medio de los icebergs y otra de rafting en un río que la empresa ha conseguido que se declare como navegable. Esta sociedad también cuenta con otro centro en la costa oeste de Groenlandia desde el que ofrece practicar kayak en el mar, junto al glaciar Kangia, y avistamiento de ballenas.

Además de localizar zonas de interés para generar negocio, este grupo tiene una división de management desde la que se ocupa de la gestión de estaciones de esquí de 12 países, entre ellos China y Turquía.

Tenemos una base empresarial y queremos replicar nuestro modelo de negocio en diferentes lugares del mundo

Más proyección exterior

Aunque ya cuenta con estos proyectos en el extranjero, Roc Roi quiere seguir potenciando su internacionalización. “Tenemos una base empresarial y queremos replicar nuestro modelo de negocio en diferentes lugares del mundo”, avanza el cofundador de la empresa, quien añade que están evaluando cuál es la mejor forma de hacerlo y que no será a través de franquicias.

Actividades estrella

En cuanto a las propuestas con más éxito dentro del amplio catálogo que abarca Roc Roi, Rabaneda precisa que la actividad estrella en verano es el rafting, seguida de los barrancos, mientras que en invierno triunfan las motos de nieve y el mushing. El empresario y guía de montaña incide en que “cuando ofrecemos una actividad va dirigida a todos los públicos, desde el más aventurero al menos”. La enseña también trabaja con grupos escolares, empresas, colectivos con discapacidad física e intelectual, etc.

El perfil de usuario es distinto según el espacio y el momento del año. Así, por ejemplo, en Andorra convive un cliente internacional junto al español, mientras que en el Pallars Sobirà, el público es nacional en primavera y extranjero en verano. Rabaneda añade que la gran mayoría de los clientes son personas que practican una actividad de aventura de forma esporádica y no repiten, si bien también hay un usuario que se engancha, se especializa y al que se pierde como cliente porque acaba yendo por su cuenta.