José Vicente Climent: “siempre hago la misma vela pero con ‘cuatro’ retoquitos”

José Vicente Climent (Sanlucar de Barrameda, 1959) afronta con comedidas expectativas el Campeonato de Andalucia de patín a vela senior que se disputará el próximo fin de semana (9 y 10 de junio) en el CAND de Chipiona. El vencedor de la última liga Andaluza de patín a vela 2017-2018, y subcampeón de Andalucia del año pasado, afirma no albergar “afán de revancha” ante Ramón Calero, quien el año pasado le ‘birló’ el título de campeón en la última manga. “Volvemos a estar ante un campeonato muy abierto. Esta Calero y ésta Rafael Ruíz. Los dos andan muy bien, siempre están ahí delante y, sobretodo Calero con mucho viento, tira mucho”.

¿Y tu no estás ‘ahí’?

(Sonríe). Bueno, si; pero si no sopla mucho. Todo el mundo sabe que yo funciono mejor cuando no hay demasiado viento. Peso poco.

¿Has entrenado para el campeonato?

Poco. Este año hemos tenido muy mal tiempo y apenas hemos navegado. Suerte que ese ‘mal’ es generalizado. Por eso decía que es un campeonato abierto.

¿Y cuáles son las previsiones meteorológicas ante el campeonato?

Para mi no muy buenas. Hasta ahora, esta semana está soplando unos ponientes de entre 18 y 20 nudos. Si sigue así, va ser duro.

Calero y Rafael Ruíz lo van a tener mejor que tú…

Pues sí, bastante mejor.

Habla con ‘tu’ velero para que te dé una vela plana…

(Ríe) sí, ya se lo he dicho…

Bromas aparte, tienes previsto participar con alguna vela especial?

No. Iré con la vela que he estado usando en los últimos meses que me funciona bien.

A ver si va a ser aquello de ‘en casa del herrero, cuchara de palo’…

(Ríe). No. Estoy tranquilo. Es una buena vela. Me aporta buenos rendimientos.

Me han dicho que empezaste a hacer velas un poco en plan Steve Jobs, en el garaje de tu casa.

(Ríe) Si, empecé muy joven, hacia los 18 años en Sanlucar de Barrameda La primera fue una vela de Optimist e, incluso, como navegaba en windsurf, me hacia mis propias velas en casa. Pero lo del garaje llegó más tarde, hacia el año 1986, cuando empecé a tomármelo más en serio. En aquel garaje se fraguaron los primeros ‘cimientos’ de la velera que acabé abriendo en Puerto Sherry en 1991.

Lo de la vela ¿te viene de muy antiguo?

Empecé a los catorce años navegando en Cadette y algo de Optimist. Luego, navegue en ‘todas’ las clases: en 420, 470, en Snipe, en Hobie Cat 14 y 16, en Fly Dutchman… hasta en crucero. Y hubo un año (sonríe) que hice hasta seis campeonatos de España… !de distintas clases!

Y lo del patín ¿cómo y cuándo surgió? Te animó alguien?

No. Lo decidí solo. Me pareció que era un barco competitivo, que me permitía navegar sin depender de nadie. Eso sucedió en el año 2001.

Y previamente, ¿no habías tenido ningún contacto con el patín a vela?

Bueno, si se puede considerar ‘contacto’ el fabricar alguna vela de patín, pues ese fue el ‘contacto previo’ (Ríe). Eso debía suceder hacia el año 1995, es decir, unos seis años antes de que decidiera pasarme al patín definitivamente.

Así ¿ya habías fabricado velas de patín antes de navegar en él?

Bueno, sólo unas pocas. La primera vela de patín ‘en serio’ me la hice para mi en el año 2002. A partir de ahí y de los resultados que fui logrando, algunos patrones de Andalucia me empezaron a pedir que les hiciera una vela. En el año 2005, Rafa Perez fue el primer campeón de España que ganó con una vela Climent.

¿Es cierta la ‘leyenda’ de que la pujanza de velas Climent en patín a vela llegó tras un ‘remake’ de una vela Depoorter?

Bueno, no sólo yo me inspiré en una vela Depoorter. También se dice que Depoorter, tras los éxitos que estaban teniendo nuestras velas, también se inspiró en una vela nuestra para mejorar las suyas.

Pero dicen que a Velas Climent lo que la consagró definitivamente fueron los ‘toques’ del ‘mago’ Juanlu Paez, campeón de España en 2009 (y, posteriormente, en 2012). ¿Fue así?

Bueno, Juanlu fue crucial para la credibilidad de Velas Climent ante los patrones de la clase patín a vela más allá de Andalucia. Pero una cosa es cierta: él tampoco ‘tocó’ tantas cosas.

A veces no es cuestión de cantidad, sino de calidad...

(Sonríe). Las velas tampoco son tan distintas las unas de las otras. En el fondo siempre es la ‘misma’ vela pero con ‘cuatro’ retoquitos. Lo que sí es cierto es que yo no me fío de mi plotter. Yo prefiero operar manualmente, asegurarme que cada paño tiene la curva buena. Eso lleva más tiempo, cierto, pero las velas salen mejor.

Así, cuando ciertos veleros aseguran que todas sus velas son idénticas ¿eso no acaba de ser cierto del todo?

Se intenta que toda las velas sean iguales. Yo a todas las velas que hago les pongo cariño porque quiero que el patrón que la use vaya bien y quede contento.

¿Está más dura que antes la competencia actual entre las veleras que hacéis velas para patín?

No lo sé. Desconozco qué valen las velas de los demás. Las mías tienen el precio que considero lógico.

¿Cómo van las ventas este año?

Tal vez estén algo menos dinámicas. Quizás el mal tiempo haya relentizado los pedidos. También es cierto que la gente acostumbra a ser bastante fiel a ‘su’ marca de vela. Cuando alguien cambia de vela lo hace para mejorar su rendimiento y, a veces lo consigue pero, otras veces, queda claro que la ‘cuestión’ no era la vela.

¿Y eso sucede porque, como dijo el responsable del astillero Pativela.cat, Rafel Figuerola, “la cuestión no radica en si el barco es de madera o híbrido, sino que la cuestión radica en el ‘indio’”?

(Sonríe). El ‘indio’ es importante, pero un indio con un ‘trapo’ no gana nada.

¿Qué te parece más decisivo para un buen rendimiento: el casco o el conjunto palo-Vela?

El casco es importante, pero creo que es más crucial el conjunto palo-Vela. Hay patrones que logran muy buenos resultados con cascos que ya tienen bastantes añitos y ello se debe a que van renovando palo y vela y, por supuesto, a que tienen un gran nivel como navegantes y regatistas.