Vientos de revolución en las tiendas de ciclismo

La Unibike de este 2016 ha evidenciado que el mercado ciclista español está muy vivo. A pesar del arranque “sepulcral” de la tarde del jueves, el viernes registró no sólo una nutrida afluencia de visitantes profesionales, sino que, además, esta fue de calidad.
Asimismo, a pesar de ausencias significativas como las de Cannondale, Scott, Giant o Merida, entre otras, varias de las grandes enseñas que siguen apostando por el certamen aumentaron la superficie de su stand, lo cual propició que marcas que el año pasado expusieron en el pabellón 12, se vieran trasladadas al 14, lo cual, en algunos casos, generó cierto malestar.
Unibike, como la mayoría de ferias ya, se va consolidando como plaza del mercado sectorial en la cual, más que operaciones comerciales, se desarrollan relaciones públicas. No en vano, sobre todo entre las grandes, prolifera aquello del “por estas fechas, ya tenemos todo el pescado vendido, pero la feria nos permite volver a vernos con los clientes y dar el pistoletazo de salida del nuevo curso”.

MÁS ALLÁ DE LOS STANDS

En esta ocasión, por otro lado, Unibike, que a nivel de oferta era la más abundante de las tres celebradas hasta ahora, (veremos qué  datos finales de afluencia acaba dando la organización) ha servido, también para propiciar encuentros, no ya entre proveedores y detallistas, sino también para que minoristas se encontrasen con otros miniristas, es decir, para que se dieran acontecimientos más allá de los stands.

Entre los minoristas del canal ciclista español se detecta que hay ganas, muchas, de revolución

Invitado por el portavoz y coordinador de Sie Cycling, David García, asistí a la reunión plenaria de dicha organización de minoristas celebrada en un hotel cerca de Ifema el viernes al mediodía y pude constatar que la situación de espadas en alto que la distribución ciclista en general mantiene ante los proveedores sigue vigente y que hay ganas, muchas, de ‘revolución’.
Y no lo digo solo por lo escuchado a lo largo de esa nueva cumbre de Sie Cycling, sino también por otra relevante reunión celebrada a primera hora de la tarde de ese mismo viernes en el primer piso del pabellón 12 de Ifema. Bajo las directrices de un abogado madrileño especializado en asociaciones empezó a gestarse la creación de una nueva asociación de comerciantes cuyo principal objetivo, a pesar del secretísimo pactado entre el letrado y los catorce minoristas reunidos, no es otro que la defensa de los intereses de las tiendas especializadas en ciclismo del país.

HARTAZGO GENERALIZADO

Entre lo oído en la reunión del Sie Cycling y lo intuido que se dijo en la reunión de esa nueva asociación no creo errar mucho si reitero lo dicho de que se fraguan aires de ‘revolución’ en la distribución ciclista de nuestro país o, cuando menos, aires que cuestionan el ‘antiguo régimen’ que sigue prevaleciendo. Que detallistas de primera fila reconocidos en todo el país y detallistas líderes de plaza, así como detallistas menos reconocidos pero igual de inquietos e indignados (si no más) se unan (aunque sea en dos organizaciones con finalidades distintas pero se unan) confirma que la voluntad de cambio en el retail ciclista es transversal.

El cambio que parece demandarse mayoritariamente se deriva del hartazgo colectivo ante el orden imperante

De este modo, el cambio que parece demandarse mayoritariamente se deriva del hartazgo colectivo ante el orden imperante. Asimismo, la mala evolución de las ventas en la primera mitad de este 2016, pero sobre todo los inciertos presagios para la segunda mitad en la que ya estamos inmersos,  ha acabado por hacer ese hartazgo aún más insoportable.

Uno que ya lleva unos cuantos años por estos lares del mercado ciclista puede afirmar que nunca había visto los ánimos de las tiendas de ciclismo tan soliviantados y con tantas ganas de reaccionar para defenderse y protegerse de lo que consideran ataques de los proveedores, del nuevo escenario retail que va consolidandose, de los nuevos hábitos de los consumidores, etc.

ACTUALIZACIÓN IMPERIOSA

Sin embargo en estas horas de revoluciones fraguandose en la ‘trastienda’ de la distribución ciclista creo que es necesario alertar a los impulsores de este cambio  de que el horizonte que debe dibujarse en esta  revolución no debe ser el de recuperar privilegios o escenarios de tiempos pasados porque aquellos privilegios y entornos pretéritos no volverán a darse nunca más.
En estas horas de gestación de revoluciones, por tanto, hay que mirar al futuro partiendo del presente por duro que pueda ser (y no del pasado).

El mercado ciclista, y en el incluyo a detallistas y por supuesto a proveedores, debe salir definitivamente del ayer, debe actualizarse

El mercado ciclista, y en él incluyo a detallistas y por supuesto a proveedores, debe salir definitivamente del ayer, debe actualizarse y para ello es indudable que deben escribirse nuevas pautas porque las escritas (y no escritas pero usadas) hasta ahora han quedado obsoletas. Siento no poder augurar con precisión como será el mercado ciclista dentro de cinco años. Lo que sí parece seguro es que no será como hoy es y que operadores y proveedores que hoy están, no estarán, así como que operadores y proveedores que hoy no están, si estarán entonces.
Los mercados son dinámicos. Quien los vea com algo estático, mejor prepara las maletas.
Aplaudo iniciativas como las de Sie Cycling y las de la nueva asociación de detallistas que ahora se gesta. En uno y otro caso los precedentes permitirán a muchos presagiarles ‘tres telediarios’. Pero recuerden que aquellos precedentes surgieron en el ‘antiguo régimen’ (ese al que muchos se siguen agarrando y haciendo bandera).

Los impulsores de la nueva asociación de detallistas que se gesta deberán superar en su nuevo reto los errores cometidos en las anteriores iniciativas

Por su parte, los impulsores de esa nueva asociación deben tomar nota de lo acaecido en el pasado y cambiar los ‘ombliguismos’ y desplazamientos de responsabilidades de antaño por actitudes proactivas y de compromiso individual en aras del bien colectivo.
Es indudable que los tiempos han cambiado, que lo que antes no cuajó, ahora si podría hacerlo. Sólo es cuestión de tiempo que, como saben, lo acaba poniendo todo en su sitio… Aunque esos ‘sitios’ tengan otra ubicación.
Mucha suerte, coraje y tenacidad a esos revolucionarios.