Pura Bici: “El sector ciclista se asemeja más a la juguetería que a la industria”

José Antonio Díaz levantó la persiana de Pura Bici en Tomares hace 10 años. La población está a escasos kilómetros de Sevilla capital y tiene una de las rentas más altas de Andalucía. Aun así, el detallista indica que, en los últimos años, han cerrado los otros comercios de ciclismo que había en la localidad, siguiendo la tendencia de lo que está pasando en esta región donde, según asegura, “se está produciendo una importante criba de puntos de venta”.

Pura Bici se ha centrado en el servicio. El 90% de su volumen de negocio se genera a través del taller y la venta de accesorios. La enseña realiza entre 40 y 50 reparaciones semanales de bicicletas, la mayoría de montaña. Díaz explica que se ha decantado por este modelo de negocio porque “hoy en día, si no vendes a precio no vendes. Y si no quieres entrar en este juego, porque entonces tal vez te pase como a los otros comercios que han cerrado, tienes que buscar un nicho de negocio más rentable”.

No te dicen que los PVP son teóricos y que vas a competir contra tus propios vecinos en un mercado sin reglas

El minorista añade que, cuando decidió poner en marcha el establecimiento, contrató los servicios de una consultora para analizar la viabilidad del proyecto. “Sobre el papel todo funcionaba, pero cuando abrí la tienda me di con un muro en la frente. Las marcas no te dicen que los PVP son teóricos y que vas a competir contra tus propios vecinos en un mercado sin reglas”.

Aprender del sector del automóvil

En su opinión, uno de los principales problemas del mercado ciclista español es la falta de formación. Dice que las marcas “ofrecen algún cursillo” pero hay pocas formaciones, y no sólo a nivel tecnológico sino también administrativo, comercial, organizativo, etc. Un aspecto que, tal como recalca, tienen muy presente en el sector de la automoción, en el que trabajaba antes de abrir Pura Bici.

Para el detallista sevillano, de hecho, el sector ciclista debería aprender del automovilístico: “En el sector del automóvil las marcas no son simples almacenistas. Además de diseñar y fabricar el producto, gestionan su imagen corporativa, las políticas comerciales y administrativas y, si no sigues las reglas del juego, te quitan la marca. En el ciclismo, sin embargo, el comercial te pregunta cuántas bicis vas a vender el año que viene, sacas la bola de cristal y te pasa la mercancía”

A su juicio, el sector del ciclismo “se asemeja más al de la juguetería que a la industria”. “No tengo nada en contra de la juguetería” –incide el detallista- “pero a veces, cuando una bici se rompe, pasa lo mismo que con un juguete. No es normal que un cliente tenga que esperar dos meses por una llanta”.

¿Quién se tiene que reinventar?

Díaz hace hincapié en que el mercado ciclista español necesita “más orden” por parte de los proveedores. El tendero esgrime que no es “normal” que haya comercios que se nieguen a facilitar el precio de un producto por teléfono. “En sus publicaciones, web y catálogo dan unos precios que no son los que se ofrecen en el punto de venta. Es de un oscurantismo tremendo”, aprecia. Pide, por lo tanto, más implicación de los suministradores ante el “arte” de “haber maleducado al cliente final con los descuentos”.

Asimismo, critica que hay proveedores “que dicen que las tiendas nos tenemos que reinventar, cuando hace ya tiempo que las tiendas nos reinventamos. Tal vez son las marcas las que se lo tienen que plantear y dejar de ser simples almacenistas”.

Los comercios de tamaño mediano, los que lo tienen más difícil

El propietario de Pura Bici observa que el mercado ciclista está estancado o incluso, desde hace un par de años, ha retrocedido. “Mi sensación –subraya- también está condicionada por la economía de la zona, ya que Andalucía está en el 75% de la media de la renta per cápita española”. Para Díaz, las tiendas que atraviesan un momento más complicado son las de tamaño mediano, ya que las grandes tienen más capacidad financiera y las pequeñas, un costo de mantenimiento más bajo.

Los comercios más veteranos creen que hemos venido a quitarles el negocio

El detallista lamenta, además, que haya cierta animadversión hacia las tiendas que han abierto sus puertas en los últimos años. “Cuando abrí la tienda hace 10 años, en Tomares no había ningún otro negocio de ciclismo. Los comercios más veteranos creen que hemos venido a quitarles el negocio, han considerado que peligraba su economía y han visto un enemigo en vez de un aliado en las tiendas de nueva creación”, apunta.