Claves de Laura Luengo para batir el récord de España de medio maratón

“Me quedé en ‘shock’. Mira que lo había pensado y era consciente de que había batido el récord, pero cuando crucé la meta sentí que estaba viviendo algo surrealista”. Así explica Laura Luengo lo que pasó por su mente cuando cruzó la línea de meta del Medio Maratón de Valencia Trinidad Alfonso con un tiempo de una hora, nueve minutos y cuarenta y un segundos. Nuevo récord de España.

21 kilómetros y 97 metros a un ritmo medio de 3:18 minutos por kilómetro, siendo la segunda mujer española en la historia en rebajar la hora y diez minutos y sumando así un nuevo logro a su carrera deportiva después de que esta primavera se proclamase campeona de España de la disciplina. Y además, como premio, la mínima para el Campeonato de Europa de Medio Maratón que se celebrará en Roma a principios de junio de 2024.

La extremeña, entrenada por Juan del Campo y Luis Miguel Martín Berlanas y que se encuentra en plena preparación para su debut en la más mítica de las distancias en el Maratón de Valencia del próximo 3 de diciembre, llegaba a la cita con el medio maratón de la capital del Turia “con el miedo de haber acumulado bastantes kilómetros esta misma semana y la anterior”. No en vano, Luengo se fue hasta los 194 kilómetros en la semana previa, una cifra que es habitual entre atletas que están preparando un maratón como es su caso.

En sus pies, las Hoka Rocket X 2

Uno de los aspectos que más comentarios genera en el atletismo actual es el del calzado que utilizan los atletas y en el caso de Laura Luengo, atleta Hoka, fueron las Rocket X 2. Este modelo tope de gama de la marca estadounidense ha acompañado a la atleta en todas sus grandes actuaciones: “he competido tres veces con ellas y he logrado mi primera medalla nacional (10K en ruta), mi primer título de campeona de España (medio maratón) y este récord de España. Como para no tenerles cariño”.

En cuanto a las prestaciones de estas zapatillas, con placa de fibra de carbono y espuma de PEBA para una mayor impulsión, Luengo destaca su estabilidad y respuesta. “Es una zapatilla firme, estable, pero que te proporciona una sensación buenísima al correr”. En su caso, las utiliza para la competición y también “para los entrenamientos de series”.

Cuenta también que en las próximas semanas, cuando realice tiradas largas específicas para su debut en maratón, utilizará también este modelo, que alterna con las Clifton 9 y las Bondi 8 para las sesiones de rodaje.

Los geles 226ERS, su particular gasolina

Además de las tremendas sesiones de entrenamiento, el consiguiente y necesario descanso y los distintos tratamientos de recuperación, otro de los aspectos que han sido clave en el éxito de Laura Luengo es la suplementación y alimentación en carrera con productos 226ERS. La fondista tomó un solo Isotonic Gel (sin cafeína) durante la prueba, en el kilómetro 12, pero en las horas y días previos, para asegurar una correcta hidrtación, utilizó las sales Hydrazero.

Luengo tiene ante sí ahora el reto de adaptar su alimentación en carrera de cara al Maratón de Valencia y para ello “estoy llevándome geles en las tiradas largas y a partir de ahora vamos a tratar de encontrar la fórmula ideal de cara a la competición”. No en vano, ha comenzado a utilizar un medidor de glucosa para conocer mejor cómo responde su cuerpo y cuáles serán las cantidades ideales para una correcta nutrición en competición.

El objetivo en el Maratón

Valencia significará su debut en los 42 kilómetros y 195 metros. Uno de los momentos más mágicos en la carrera deportiva de un atleta y que Laura Luengo afrontará con ilusión pero también las dudas clásicas de la primera vez. “Sé que puedo correr muchos kilómetros a 3:28 el mil y mi objetivo será hacer la mínima olímpica (2:26:50), pero siempre tienes esa incertidumbre de cómo será un momento tan especial”.

En su mente, la posibilidad de estar en unos Juegos Olímpicos con los que hace poco tiempo apenas podía soñar. Sería la consecución de un logro único a cargo de una atleta que ha basado todos sus éxitos en dos premisas fundamentales: ilusión y trabajo.