La moda de los jóvenes de muscularse en el gimnasio dispara los trastornos alimentarios

El doctor en psicología del consumidor y profesor de la Escuela Universitaria de Comercio y Distribución (Escodi), Albert Vinyals, destaca que el auge de los jóvenes de muscularse en los gimnasios está disparando de forma “alarmante” los trastornos alimentarios entre estos y los relacionados con su propia imagen. Así lo ha explicado en base a casos detectados entre sus propios alumnos y según numerosos estudios.

El psicólogo expone que esta tendencia tiene una proyección a largo plazo y que “prevalecerá mientras existan las redes sociales”. Asimismo, advierte que la exposición del cuerpo por parte de los adolescentes en las redes sociales hace que “persigan cuerpos muy trabajados a nivel muscular”.

El especialista alerta de que estas plataformas generan “frustración, inseguridad y ansiedad entre los jóvenes. Algo que no había ocurrido anteriormente, cuando solo los personajes públicos se mostraban públicamente y definían los estándares de belleza”.

TRASTORNOS PSICOLÓGICOS

Vinyals menciona que los propios centros deportivos promueven la proliferación de esta tendencia. “Existen centros de escalada dónde ofrecen trípodes para que los clientes se puedan fotografiar y cada vez son más comunes las ‘salas de posing’ en los gimnasios, creadas que los clientes se fotografíen entre equipamientos y luces”, valora. 

Según lamenta, el problema de esta exposición está en que favorecen la expansión de trastornos psicológicos entre la población juvenil, como puede ser la vigorexia, “un desorden mental, caracterizado por la obsesión por el físico para alcanzar una imagen ideal”.

POSIBLE REEMPLAZO A FUTURO

Sobre la moda de muscularse, sostiene que ésta está “en una etapa inicial de expansión, según la teoría de la curva de difusión de las innovaciones”. En su opinión, durará más tiempo que las modas vigentes del crossfit o de la escalada en rocódromos porque, estos casos, constituyen actividades específicas.

Según éste experto en consumo, cuando la tendencia madure pasarán a practicarla más personas mayores y dejará de ser tan masiva entre las jóvenes. “Las tendencias sociales suelen calar primero en las personas más jóvenes y, cuando se popularizan, atraen a las personas de más edad”.

Vinyals advierte también que esta moda podría ser reemplazada en el futuro por alguna otra y pone como ejemplo “los gimnasios centrados en promover la salud mental”. Estos centros, según él, podrían incluir un trabajo de autoaceptación, mindfulness y autoconocimiento.