(27-9-2019) ¿Haces ejercicio habitualmente y te preguntas qué necesitas ingerir después de realizar deporte? Es importante aquello que comes después de tus entrenamientos, pero no debemos olvidar aquellos alimentos que no se deben comer. Laia Gómez, dietista-nutricionista deportiva de Alimmenta y triatleta nos lo cuenta.
Es algo muy común que, después de ir al gimnasio, uno aproveche la excusa para darse lujos, comer aquello que no se debería ingerir o comer en gran cantidad. El pensamiento de ‘si hago ejercicio cada día puedo comer cada día un croissant’, o ‘no pasa nada, como he entrenado me puedo permitir cenar una pizza’, y ‘no hay problema, puedo beber lo que quiera que lo he quemado en la cinta’, reflexiona Laia Gómez, dietista-nutricionista deportiva de Alimmenta y triatleta.
“Si has usado el ejercicio en alguna ocasión para comer mal debes saber que es un error. Antes de continuar quiero dejar claro que comer saludable no significa comer perfecto todos los días de tu vida. Obviamente puedes darte algún capricho de vez en cuando, pero sin necesidad de justificarte, algo ocasional”, explica Gómez.
Puede que, “después de un entreno, se te cierre el estómago o puede que se te abra. Sea como sea tu elección después de un entrenamiento será importante si quieres asegurarte una correcta recuperación. Es decir, regenerar tus músculos y tu glucógeno muscular para sentirte bien al día siguiente, poder seguir entrenando y ver los resultados de tus entrenamientos”, añade la especialista de Alimmenta.
Seis alimentos a evitar
Si no quieres echar a perder tu entreno, recuerda los 6 alimentos que debes evitar, como aconseja Laia Gómez:
- Bollería y galletas. Es cierto que, después de un entrenamiento, los carbohidratos son importantes, pero debes elegir bien el tipo. Si no tienes prisa para recuperar, porque tu próximo entreno será en 24 o 48h, elije carbohidratos complejos como el que aporta el arroz o la pasta. La bollería, galletas y dulces en general te aportan mucha cantidad de azúcares simples, perjudiciales para tu salud y además van acompañados de grasas saturadas. Juntos te aportarán una cantidad muy grande de calorías que fácilmente superen las que has quemado en el gimnasio.
- Comida rápida. Si sales hambriento de tu entreno y pasas por algún restaurante de comida rápida, puede que se te vayan los ojos. Alimentos como las pizzas, hamburguesas, kebabs… son un recurso fácil, rápido y apetecible, pero son una mala elección. Todos ellos te aportarán una gran cantidad de grasas saturadas, además de un montón de sal, aditivos y aunque no lo parezca azúcares. No son una buena elección, no solo por lo que te aportan, sino por lo que no te aportan. Serán alimentos con muy poca cantidad de micronutrientes (vitaminas y minerales) y puede que no te aporten las raciones que necesitas de macronutrientes. Una pizza por ejemplo, te llenará pero la ración de proteína que necesitas no te la aportará.
- Chocolate. Hoy en día, parece que el chocolate es bueno para todo. Nos sugieren que hay motivos para consumirlo a diario pero… ¿realmente es así? Un chocolate rico en cacao, de mínimo el 80%, no es un mal alimento, pero esto no significa que sea necesario ni conveniente consumirlo diariamente. En consulta muchos me dices ‘es que después de entrenar mi cuerpo me pide chocolate’ ¿Te pasa a ti también? Realmente tu cuerpo no te pide chocolate, te pide comer carbohidratos. Así que dáselos de buena calidad como hemos comentado junto a una ración correcta de verduras y proteína como el pescado, el huevo… Ten en cuenta que el consumo de ciertos alimentos como el chocolate puede desplazar aquellos que realmente necesitas.
- Carne procesada. Podrían estar en el mismo grupo que la comida rápida, pero quiero que las identifiques y tengas claro qué son y por qué no son recomendables. La carne procesada es aquella que ha sido transformada para mejorar el sabor y preservar el alimento. Algunos ejemplos son el beicon, las salchichas, hamburguesas y también embutidos como el chorizo o el fuet. Este tipo de carnes contienen, entre otros ingredientes, una gran cantidad de grasas saturadas y trans que no te ayudarán en tu recuperación ni mucho menos a tu salud. Y según la calidad del producto, puede que tampoco te aporten las cantidades que necesitas. Si llegas a casa con pocas ganas de cocinar y decides hacer un bocadillo de fuet será una cena insuficiente. Puede que, a nivel calórico cumpla, pero no te aportará la ración que necesitas de proteína para regenerar tus músculos. Si eliges unas salchichas quizás sí que tengas la cantidad que necesitas, pero la cantidad de grasa retrasará mucho la digestión, complicando así tu recuperación, además de incrementar las calorías ingeridas pudiendo ser excesivas.
- Refrescos. Es normal tener sed después de hacer ejercicio, pero ¡bebe agua! Después de una hora de ejercicio no será necesario que consumas ninguna bebida isotónica ni energética. Para rehidratarte necesitas consumir agua, mínimo 1 litro por hora de entrenamiento. Y sodio, con lo que solo deberás acordarte de poner un poco de sal a la comida que realices a continuación. Ten en cuenta que los refrescos, incluidos los zumos, contienen una cantidad enorme de azúcar que no necesitas y que además pueden perjudicar tu salud.
- Barritas energéticas. He querido dejar las barritas para el final. En el mercado de suplementación deportiva hay millones de barritas. Para antes, durante y después, pero esto no significa que sean para ti. Muchas de las barritas deportivas del mercado no son un alimento necesario ni bueno para una buena recuperación. Pueden ser de ayuda en ocasiones puntuales pero la gran mayoría no te aportan la cantidad suficiente de proteínas y sí que son ricas en grasas y azúcares, por lo que no suelen ser un alimento a potenciar. En el caso que las quieras elegir fíjate bien en los ingredientes y en la tabla de composición nutricional, allí podrás ver la cantidad de grasas, azúcares y proteínas que te aporta. Si no llega a un mínimo de 18-20g de proteínas y supera los 5g de grasa, descártala. Si sigues teniendo dudas y no tienes claro cuál elegir, no las consumas. Prepárate un bocadillo de tortilla o hazte una cena completa como un salteado de verduras con fideos y dados de pollo.
“Ahora ya conoces aquello que debes evitar después de tus entrenos. Es importante que elijas bien si quieres que tus esfuerzos se vean recompensados, que mejores día a día y además tu salud se mantenga intacta. Debes recordar y convencerte que, aunque tu gasto calórico sea alto no significa que puedas comer alimentos insanos habitualmente, ya que aunque no subas de peso tu salud, rendimiento y recuperación si se resienten”, concluye Laia Gómez.
Más información en https://www.alimmenta.com/
Mi tio comia de eso y se murio