Profesionales del pilates sostienen que “la mayoría de gimnasios no lo practican con integridad”

El método del pilates lo originó el alemán Joseph Pilates a principios del siglo XX. La presidenta de la Asociación de Profesionales del Pilates de Catalunya (APPC), Raïssa Janer, lamenta que, “a raíz de entonces, son muchos los que lo han practicado con múltiples versiones y le han otorgado definiciones diferentes”. 

La profesional del pilates reconoce que es “imposible que haya una misma versión para todos”, pero pone énfasis en que “debe haber un único denominador común: el trabajo con aparatos”. Un segundo punto importante que destaca es “que se practique en grupos reducidos para ofrecer una atención personalizada, tal como requiere el método original”, y que sea un trabajo individual.

SUPERFICIALIDAD CULTURAL

Para ella, “la mayoría de gimnasios no practican con integridad el pilates porque no incluyen estos dos factores básicos”. Desde su punto de vista, los centros deportivos “lo imparten para grupos masificados y sin personalización, y limitan el material con el que se trabaja al mat o la colchoneta”.

La presidenta de la asociación lamenta que “esto perjudica en varias esferas”. Por un lado, señala que la persona que lo practica “no recibe los beneficios propios del método”. Por otro lado, indica que los profesionales “se ven obligados a justificar el modelo de negocio constantemente y el precio que va asociado a la personalización y a la aparatología”. Y concluye que “perjudica al método en sí mismo porque se deja perder por la superficialidad cultural en el consumo”.

NO ES YOGA

Un error muy común en la sociedad actual, según la representante de la asociación, es confundir el yoga con el pilates. “No es una variante del yoga. Se confunden porque están relacionadas con la atención plena mientras se practican”, explica Raïssa Janer. 

Argumenta, por contra, que son muy distintas: “Mientras el yoga es una práctica espiritual en la que la parte corporal acompaña a la filosofía del yoga, el pilates es un sistema de ejercicios físicos con aparatos donde es importante la mente enfocada en el trabajo corporal, en la mayoría de casos, una conciencia corporal”.

ENTENDER EL CUERPO Y CUIDARSE

Janer señala que el pilates es complementario a cualquier otra práctica física y que conlleva el fortalecimiento de la musculatura y el estiramiento y control corporal. La especialista sostiene también que, al estar el pilates identificado como una práctica que resuelve y previene dolencias, recibe personas derivadas del sector médico. Pero matiza que, recibir una atención personalizada “tiene un precio”.

La presidenta desmitifica que abrir un centro de pilates sea rápido y barato, y atribuye el esfuerzo inversor a si la iniciativa es “de un particular o de un grupo empresarial”. Eso sí, reconoce que los aparatos de pilates tienen una duración mayor porque “se estropean menos que las tradicionales máquinas de los centros deportivos y porque el mantenimiento no es caro”.

REGULACIÓN INMINENTE PARA LOS PROFESIONALES

Preguntada sobre los profesionales del pilates, Janer lamenta que todavía no haya una regulación para los que imparten esta metodología. También explica que “hay personas que hacen un curso en diez horas y creen que hacen pilates porque es lo que les han vendido”, pero que realmente no es así.

La profesional de pilates revela que el Sistema Nacional de Cualificaciones y Formación Profesional, que forma parte del Ministerio de Educación del Gobierno, está a punto de publicar en el BOE el programa básico para tener una acreditación técnica en pilates. Unos avances se han desarrollado a raíz de la pandemia, concreta. “Lo siguiente será que haya una educación profesional que incluya las bases de conocimiento teórico, fisiológico y biomecánico y con las bases metodológicas según el modelo original”, concluye.