Cómo ejercitar el Timo o ‘glándula de la felicidad’ con el yoga

Lucía Liencres, fundadora e instructora de The Class Yoga, nos explica en primer lugar qué es el Timo. La palabra procede del griego “thymos” y significa energía vital. De hecho, el Timo se ocupa de mantener nuestra energía vital haciendo frente a las enfermedades. Es un órgano pequeño ubicado en la parte superior del pecho, bajo el esternón. También se le conoce como ‘glándula de la felicidad’.

Afirma que “un importante órgano del sistema linfático que tiene forma piramidal. Se encuentra en el mediastino (cerca del corazón) y es el punto final de desarrollo de los linfocitos”.

Ubicación del Timo en el cuerpo humano.

“Poco después del nacimiento”, añade, “el timo comienza a segregar una hormona llamada timosina que hace que los linfocitos evolucionen a linfocitos T maduros. En el timo se produce la timosina, que estimula el crecimiento de las células T, y éstas son las encargadas de protegernos contra los virus y las infecciones”, detalla Liencres.

El Timo que se mantiene activo durante toda la vida y cumple con sus funciones independientemente del tamaño, pues va disminuyendo con la edad. Puede llegar a pesar hasta 37 gramos, mientras que al final puede no supere los 6 gramos.

Además,  el Timo regula las emociones y está directamente conectado a los sentidos, la conciencia y el lenguaje. Crece cuando estamos alegres y encoje cuando estamos estresados o enfermos.

Asanas para el Timo

Para cuidar el Timo y favorecer su funcionamiento, se recomienda la práctica de ejercicio físico moderado. Se ha demostrado que un problema relacionado con esta glándula puede perjudicar el buen funcionamiento del sistema inmune.

Lucía Liencres destaca que hay algunas asanas de yoga para cuidarlo y/o ejercitarlo. “El Timo se ejercita con prácticas de yoga suaves pero regulares ya que hacen que se aumenta el flujo de oxígeno, mejore la circulación de la sangre y ayuda a mantener sano el sistema inmunológico y esto hace que la glándula del Timo esté más saludable”.

La especialista recomienda “prácticas suaves de Hatha yoga de 15-30 minutos”. Se trata de una modalidad de yoga clásico de posturas y técnicas de respiración y se utilizan las posturas para lograr el equilibrio entre la fuerza y la flexibilidad.

Liencres aconseja también, “para estimularlo y mantenerlo activo, dar pequeños toquecitos con los dedos debajo del esternón y sobre el Timo. De forma suave y rítmica”, concluye Lucía Liencres. Accede aquí para seguir el programa de 30 días que propone Lucía Liencres, de The Class Yoga: